Somos nuestros propios verdugos. La censura es autocensura. El progreso es miseria. La inteligencia basura. Las leyes sogas al cuello. La voluntad un fango hasta el cuello.

Los derechos de autor son el valor de la personalidad y dan al individuo una característica única, pero despiertan la locura del poseer. Todos quienes son tentados por el brillante billete quieren adueñarse del dinero que puede haber detrás de una escala de Do.

Todavía no es tan apocalíptico, no mientras lo conveniente se mantiene. Hay todavía libertad aunque la sociedad vaya hacia la esclavitud.

Quiero pensar en las maravillas que no existirían bajo la dictadura cultural:




















Al fin y al cabo en una dictadura cultural completamente radical solo habría una censura de todo lo que no fuera oficial. Viéndolo con los ojos de este tiempo podríamos pensar lo oficial como el reggaeton y el trap, aunque hoy todavía podamos escuchar música rara en nuestras casas e incluso reunirnos en el espacio público a disfrutar de nuestro gusto por la música que no hace parte de la hegemonía o moda, sin embargo la producción se ha enfocado en lo conveniente siempre, incluso el rock que antes era conveniente es hoy un enigma artístico.











.........................Túrututúrutu
.........................turutú turutú
.........................túrututúrutu turu
.........................tú turutú
Túrututúrutu turutú turutú
Túrututúrutu turutú turutú
Túrututúrutu turutú turutútu
Túrututúrutu turutú turutú
Túrututúrutu turutú turutútu
Túrututúrutu turutú turutú.

ffsssiiiuu uiuiuiui...

Dicen que todos podemos triunfar. Vulgarmente escuchamos esto en forma de "el pobre es pobre porque quiere". Es cierto que ahora todos podemos ser artistas, pero artistas invisibles si se nada contracorriente, la historia lo dirá.

"Si miráramos atrás en la historia al rededor de los 20' cuando surgió el negativismo, vemos que por esos años se inventaría el no-arte con la no-vela Quiérome Morir, la primer novela no raza no clase no genero que no generó ninguna opinión por parte de la crítica hasta que por un BUG en un algoritmo digital la no-obra se auto difunde a través de la publicidad de Facebook y Google. Sin embargo al ser una pieza negativa no pudo conectar con el positivismo imperante sino tan solo treinta años después, aunque pero en realidad...








......................BUT...
Fuck you Lars!
Can you
Listen,